l

Estoy cansada,
con menos miedo que antes y es un buen camino. No estoy aun segura de nada.. pero todo ha ido mejorando de a pocos.
Ha sido una larga travesía de varios meses, noches malas y días peores... pero al fin y alc abo sigo aquí.
Algunas veces creía que jamas lo lograría,
pero esa noche cuando ya no daba un solo aliento más, el destino se encarga de hallarte un descanso.

Derrepente, todas las puertas se cerraron con llave. No tenía absolutamente un sólo orificio por donde pudiera tomar un poco de aire y seguir avanzando. Estaba desanimada , desesperada, irritada, acobardada, todo lo que una puede pasar mientras piensas en todo menos en tí.

Todo el proceso, que parecía de nunca acabar .. se hacía realidad, NUNCA TERMINARÍA.
Al principio, tienes toda la fé y confianza de que todo saldrá bien, al menos el primer paso es creer en eso. Pero para alguien como yo, impaciente, hiperactiva, intranquila, acelerada, aburrida, débil, cobarde, con pocas seguridades de si misma, se ve en un proceso como este, puede ser fatal.

Trancurría el tiempo, y poco a poco iba viendo la luz de la salida, un hoyo al final del túnel que se hacía cada vez más claro. Cada que me cansaba, me detuve.. y nunca miré hacia atráz; pero cada que pensaba que estaba cerca, el túnel jamás terminaba. La luz que de pronto parecía estar completamente sobre tí, no era más que una falsa salida...

Los días transcurrían, sin mencionar el dolor , lágrimas, insomnio, pesadillas, malestar, impotencia y pesar que acompañaron en todo el transcurso del sendero. Cuando al fin todo parecía acabar, estaba muy tranquila  no feliz, no orgullosa, pero si desfallecida. Quería que todo esto se terminara para bien o para mal, simplemente me sacaran de este hoyo.

Esa mañana, no la olvidare jamas. Dios hizo que me enfrentase a todos y cada uno de mis peores miedos... a los cuales siempre le shuí, las pesadillas que de niña me despertaban y me tenían despierta hasta el amanecer, se hicieron realidad.